Un país mejora su competitividad exterior si crece el peso de sus exportaciones en las exportaciones globales, es decir, si crece su cuota en el mercado global. En cambio, un país empeora su competitividad exterior si cae el peso de sus exportaciones en las exportaciones globales. Como explica muy bien el profesor Rafael Myro aquí, la cuota de mercado es un indicador que refleja el resultado de la competitividad, a diferencia de otros indicadores, como los salarios o la productividad, cuyo objetivo es capturar los determinantes de la competitividad.

Los datos de la Organización Mundial de Comercio sobre exportaciones de bienes nos permiten analizar cuál ha sido la evolución de la competitividad exterior de la economía española para un periodo largo de tiempo: 70 años. Como muestra el gráfico, en 1950, las exportaciones españolas solamente suponían el 0,63% de las exportaciones de bienes que se realizaban en el mundo. Las exportaciones españolas perdieron peso en las exportaciones mundiales en la década de 1950 y la primera mitad de 1960. Sin embargo, a partir de ese momento se produce un continuo crecimiento de la competitividad exterior que durará 40 años y alcanzará su cumbre en el año 2003, con un porcentaje de las exportaciones mundiales del 2,06%.

 

Evolución de la cuota de las exportaciones españolas en las exportaciones mundiales de bienes, 1950-2020 (%)

Fuente: www.wto.org

 

Entre los años 2003 y 2012 desciende la competitividad exterior, cayendo la cuota de España al 1,59% al final del periodo. En los últimos ocho años, la economía española ha recuperado parte de su competitividad exterior, hasta alcanzar el 1,75% de las exportaciones globales de bienes en 2020. Durante el año Covid, España solamente ha perdido una centésima de su cuota.

Hay dos factores principales que explican la evolución de la competitividad exterior de un país. El primero es el crecimiento económico. Las exportaciones de un país están estrechamente ligadas a su tamaño económico. Si un país aumenta su peso en la economía mundial, también crecerá su participación en las exportaciones globales. Por ejemplo, entre el año 1965 y 2003, el peso de España en la economía mundial se multiplicó casi por dos, resultado que está en línea con el gran crecimiento de su competitividad exterior que se observa en el gráfico. En cambio, en el periodo 2003-2019 el peso de la economía española en la economía mundial se redujo alrededor del 30%. Esta reducción, que es consistente con la que observamos en la competitividad exterior, se debió al gran crecimiento de China, que se tradujo en un mayor peso de este país, a costa de los demás, en la economía mundial y las exportaciones globales.

El segundo factor que explica la evolución de la competitividad exterior son los costes de comerciar con otros países. Si un país reduce los costes de comerciar en mayor grado que sus rivales comerciales, sus bienes serán relativamente más baratos, lo que provocará un aumento de la demanda y un crecimiento de su cuota en las exportaciones globales. La reducción de los costes de comercio está ligada a la mejora de las infraestructuras de transporte, a la reducción de las barreras arancelarias y no arancelarias, y a la mayor capacitación de las personas. Como se explica el informe España 2050, España ha dado un paso adelante enorme en estos ámbitos durante las últimas décadas, especialmente desde su integración a la Comunidad Económica Europea.

Es lógico que España vaya perdiendo cuota en las exportaciones mundiales en los próximos años debido al proceso de convergencia de las economías menos desarrolladas, tanto en renta como en costes de comercio, con los países más avanzados. En todo caso, será importante que sigamos comparando la evolución de la cuota de mercado de España con la de sus rivales comerciales más importantes, como Alemania, Francia, o Italia, que también experimentarán una reducción en su cuota de mercado debido al proceso de convergencia. Ello nos permitirá conocer si España sigue manteniendo su capacidad de competir en los mercados internacionales con las economías más avanzadas. ¡Nos citamos para evaluarlo dentro de 70 años!

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