El Ind-ALDE se ha actualizado para el mes de enero con los datos publicados hasta diciembre de ventas y producción industrial, y hasta enero de renta y de afiliados. El indicador mensual sigue marcando una tendencia de mejora que inició a comienzos de 2013. Una vez incorporados los nuevos datos, el valor del indicador en diciembre es de -0,2 mejorando el dato que presentó en el mes de noviembre de -1,3. El valor alcanzado es similar al que presentaba en el inicio de la crisis y, de seguir esta tendencia, pronto tomará valores positivos.
Atendiendo a las tasas de crecimiento interanuales, los indicadores individuales que forman parte del Ind-ALDE, se encuentran estabilizados y, en algunos casos, en mejor situación que en los meses anteriores. El único dato negativo es el de ventas, que caen 0,2% en diciembre frente a la subida de 0,4% en noviembre. La producción industrial crece en diciembre un 3,5%, frente a la caída de 0,1% en noviembre. Las ventas y los afiliados suben por primera vez desde el inicio de la recesión, un 0,2% y un 0.1% en enero, frente a las caídas de 0,5% que ambos mostraron en diciembre.
Esta evolución coincide con la que han marcado otros indicadores de actividad económica como el que elabora FEDEA y el Indicador Sintético de Actividad (ISA) que elabora el Ministerio
En el análisis cuantitativo macroeconómico disponemos de escasos resultados sólidos, máxime cuando la misma medición está sujeta a errores importantes, por lo que cualquier intento, como este, de ilustrar la realidad ha de ser bienvenido. Los indicadores de coyuntura o de sentimiento, a nivel nacional o internacional, son intentos muy loables de adelantar lo que posteriormente será la medición de un PIB, en este caso la medición del PIB español realizada por el INE, que -en este caso y en todos- debería publicarse junto con una aproximación de la desviación estándar del error de su medición. Conviene advertir que a pesar de los errores en toda medición del PIB, esta magnitud constituye la medición más fiable del crecimiento de una economía, que no puede reemplazarse por ningún indicador macroeconómico. Podría decirse que estos indicadores per se no son nada, su posible valor radica en que nos avancen con cierta precisión los datos del PIB. Estos indicadores se pueden construir utilizando conjuntos muy diferentes de información, tratada o depurada inicialmente por procedimientos muy diversos y utilizando métodos muy distintos. para elaborar los propios indicadores sintéticos. La forma de valorar los indicadores debe consistir en analizar su capacidad para predecir el PIB y en este sentido todas las instituciones que elaboran indicadores deberían analizar en profundidad la capacidad predictiva de sus correspondientes indicadores, pues en ello, y no en la capacidad de lobby de la institución que los publica, está su valor. Los errores de los indicadores en predecir el PIB deberían publicarse y al sacar un nuevo dato del indicador este debería ir acompañado de la desviación estándar de su error de predicción, para que los usuarios pudieran valorarlo en su justo término. Esto último es de gran utilidad para los agentes económicos y lo que se plantea es animar a las personas e instituciones que publican sus indicadores a que desarrollen métodos por los que los usuarios puedan valorar su producto. Valorar un indicador porque da una visión similar a otro, puede indicar simplemente que ambos se han construido de forma muy parecida, con lo que falta todavía una valoración precisa de ambos.
Mis felicitaciones a todos aquellos que intentan aportar más resultados para entender la evolución macroeconómica,y en particular a los autores de este indicador, y a su vez deseo animarles a que no se queden con la publicación del indicador sino que se divulguen formulaciones con las que los usuarios puedan valorar los datos que se van apareciendo.
Estimado Antoni,
Estoy completamente de acuerdo con tus comentarios. Los indicadores económicos, como éste que uso en el blog, tratan de paliar el retraso en la publicación típica de los agregados económicos como el PIB, pero no de sustituirlos. Es importante recordar que en las entradas del blog trato de evitar los aspectos más técnicos, ya que se perdería una valiosísima capacidad divulgativa. No obstante, cada vez que se publica un dato del PIB trimestral, suelo añadir una sencilla comparativa (casi siempre visual) entre la evolución del indicador en el trimestre de referencia y el PIB, como aquí:
http://blogaldeaglobal.com/2013/10/29/indicador-de-coyuntura-octubre-2013/
Cuando acaba cada año, también comento el comportamiento del indicador y del PIB para ese año, como aquí:
http://blogaldeaglobal.com/2013/12/28/indicador-de-coyuntura-diciembre-2013/
Aprovechando tus acertadísimos comentarios, me gustaría ofrecer la oportunidad a los lectores con más inquietudes técnicas a comprobar la habilidad de este tipo de indicadores para anticipar los valores del PIB de España (1 y 2), de Europa (3 y 4) y de EE.UU (5) en los siguientes enlaces:
(1) http://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/j.1467-9957.2010.02212.x/abstract
(2) http://link.springer.com/article/10.1007%2Fs13209-011-0078-z
(3) http://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1002/jae.1174/abstract
(4) http://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1002/for.2284/abstract
(5) http://link.springer.com/article/10.1007%2Fs00181-013-0731-4